Sporting no pasó del empate ante un juvenil elenco de Liniers y logró al menos evitar el descenso directo, aunque jugara la Promoción ante el subcampeón del Torneo Promocional para disputar su permanencia en Primera División.

Fue 1-1 el partido en el Doctor Alejandro Pérez de la Avenida Alem, donde el Rojinegro sin jugar bien tuvo las chances más claras para abrir el marcador.

Sin ir más lejos, a los 29 y tras un penal bien sancionando por Villamil, Castellano tuvo el primero pero desde los doce pasos el debutante Juan Cruz Manganaro (hijo de Juan Pablo y a la postre, figura del partido) atajó el remate.

El volante tendría su chance diez minutos después cuando luego de un centro desde la izquierda que cabeceó de manera cruzada y notable para marcar el 1 a 0.

Ventaja y tranquilidad para Sporting, que en base a los resultados en las otras canchas se fue al descanso salvándose de todo y clasificándose a los playoffs.

Sin embargo, en el complemento el Rojinegro se complicó sólo: apenas iban 3 minutos cuando Horacio Balbuena le dio un insólito e infantil puñetazo al balón en el área ante la atenta mirada de Leonardo Villamil, quien lógicamente sancionó el penal.

Julio Daniel Acosta, en su último partido como futbolista, cambió penal por gol a los 4 y detuvo el marcador hasta el final.

Sporting tuvo chances, más para ganarlo que para perderlo, pero no pudo convertir el segundo y, con los resultados puestos en otras canchas (Tiro estaba perdiendo ante Villa Mitre y Olimpo vencía a La Armonía), sabía que al menos mantenía su permanencia en Primera de manera directa.

Ahora, también con el Regional Amateur entre medio, deberá afrontar la Promoción ante el subcampeón del Promocional 2023. Suspenso e incertidumbre para un equipo que todavía no podrá relajarse de cara al fin de año.