Rosario Puerto Belgrano se despertó a tiempo y con un gran complemento goleó a Pacífico de Cabildo por 4 a 0 para clasificar a los playoffs del torneo Apertura “Sebastián Urtizberea” en el Promocional Liguista.

Además de tener una gran tarde sobretodo en el complemento, donde anotó los cuatro goles, al Tricolor también le sirvió de mucha ayuda la victoria de Comercial (3-1) ante Libertad, marginando al equipo de Villa Rosas del cuadrangular.

Los de Horacio Schumacher, con tres bajas claves en defensa (Bocca, Cholo Fernández y Orellana no jugaron por lesión) y sin Nicolás Ovando (continúa recuperándose), se mostraron imprecisos en el primer tiempo y no pudieron lastimar a un estático Tifón verde.

Pero todo cambió tras el entretiempo y Rosario fue otro equipo. El primer gol, incluso, llegó cuando apenas se jugaban 2 minutos tras una acción preparada de córner: Brun recibió desde la izquierda y centró para Debliger, que se anticipó en el primer palo. 1-0 y tranquilidad.

Rosario siguió dominando y llegó al segundo con un golazo, el más lindo de la tarde. Cuando se jugaban 14 minutos, Garay robó una pelota en el sector izquierdo y cedió para Debliger, quien abrió el balón para un Agustín Trotta letal: el goleador histórico Tricolor sacó un sablazo desde 25 metros que picó, descoloco a Schiaffino y se ubicó sobre la “ratonera” derecha. Notable.

Las buenas noticias llegaban desde Villa Rosas y con ello el alivio Francés se mostró en el campo: con los cambios, Rosario siguió jugando y llegó al tercero y también al cuarto, ambos con debutantes en la red.

A los 35, Román Astudillo (quien volvió hoy a jugar en Primera tras un año), anotó al rebote de un córner desde la izquierda y a los 48, Francisco Navarrete, goleador de la Reserva, definió con clase ante Schiaffino en una contra letal que terminaría con el partido.

Festejo, desahogo y alivio para un Rosario que desde la llegada de Horacio Schumacher sacó 9 puntos sobre 12, convirtiendo 9 goles en 4 partidos y recibiendo apenas 1, todo esto jugando fuera del Coloso y sin el apoyo de su gente.

Números que sostienen una marcada mejoría con el correr de los fines de semana y que tendrán en el duelo de semifinales ante San Francisco (seguramente en dos semanas) una esperada medida.